Lubos, fascinado por la naturaleza, fotógrafo y cineasta aficionado, huyó del mundo de los hombres para dedicarse al estudio de los murciélagos. Su mayor apoyo, su madre de setenta y cinco años, se preocupa por su futuro. Muchos piensan que Lubos está loco, pero solo hasta que ven esta película. Ahora creen que los locos son ellos. |