A lo largo de su trayectoria Play-Doc no solo ha presentado las primeras retrospectivas españolas de cineastas consagrados, contando con la presencia de verdaderas leyendas del cine documental, sino que se ha esforzado por reivindicar a otros tantos magníficos realizadores cuya obra ha sido ignorada, censurada o es sencillamente desconocida para la inmensa mayoría.

Este es el caso de Manfred Kirchheimer, uno de los cineastas a los que Play-Doc homenajea este año, presentando la que será su primera retrospectiva en España y que será también su primera retrospectiva internacional. En 2017 el Museo de Arte Moderno (MOMA) de la ciudad de Nueva York le dedicó una importante retrospectiva. A pesar de que la obra de Kirchheimer ha sido reconocida y ha viajado por festivales de todo el mundo, será en Play-Doc donde se mostrará su obra en conjunto por primera vez fuera de su país.

Nacido en Saarbrücken, en Alemania, en 1931, Manfred Kirchheimer emigró con su familia a Nueva York huyendo del nazismo cuando contaba con tan solo cinco años de edad. Cursó estudios de cine en el City College y tuvo como professor al pintor y cineasta Hans Richter, pionero del cine abstracto dentro del movimiento Absolute Film. Una vez graduado Kirchheimer trabajó con el documentalista Leo Hurwitz, perseguido durante el período McCarthy por sus fuertes creencias políticas de izquierda y uno de los fundadores del documental social norteamericano. Ambas influencias se aprecian en la obra de Kirchheimer que centra su interés en las vidas y labores de la gente de la ciudad, en particular de aquellas minorías desplazadas como las de la comunidad judía de Washington Heights, a la que él mismo pertenecía.

Desde sus primeros cortometrajes como Colossus on the River (1963) hasta sus obras maestras de madurez como Stations of the Elevated (1981), película de culto que se pudo ver en Play-Doc 2017, Kirchheimer se revela como un consumado poeta visual y uno de los cineastas documentalistas más extraordinarios y menos conocidos en el ámbito internacional. Como dice un artículo publicado en The Guardian el pasado mes de junio, Kirchheimer es el mejor documentalista del que probablemente nadie haya escuchado hablar. A sus 90 años, el propio Manfred Kirchheimer estará en Tui para presentarnos una amplia retrospectiva de su obra, que incluye también su película más personal y controvertida:We Were So Beloved (1985) comparada por la crítica con las monumentales Shoah (1985) de Claude Lanzmann o Le chagrin et la pitié (1969) de Marcel Ophuls. Asimismo el festival gallego presentará en estreno mundial algunos de sus trabajos más recientes finalizados en 2021 y realizados durante la cuarentena.

También la norteamericana Bette Gordon estará por primera vez en España en Play-Doc presentando su obra en el marco de una retrospectiva y que comprenderá los trabajos que la cineasta norteamericana realizó entre 1974 a 1983. Aunque la Bette Gordon ha sido celebrada con cintas más recientes como The Drowning (2016) o Handsome Harry (2009), película esta protagonizada por Steve Buscemi, su obra comprendida en esa década documenta la aparición de una nueva era en la cinematografía radical. La selección de películas incluye las tres colaboraciones junto al reconocido artista James Benning: Michigan Avenue (1974) y I-94 (1974) y The United States of America (1975).  También se podrán ver las películas que Gordon realizó en solitario y en las que afianzó su interés por los motivos de género y por unas estructuras narrativas más tradicionales como Variety (1983) Empty Suitcases, (1980) y Anybody’s Woman(1981). Redescubierta recientemente, Variety es sin duda una de las películas independientes más importantes de los años ochenta convertida hoy en día en película de culto. Maravillosamente interpretada por Sandy McLeod, en ella participa una larga lista de nombres icónicos de la vanguardia contracultural de la época, como la fotógrafa Nan Goldin, la actriz Cookie Mueller y el actor Luís Guzmán. La película está co-escrita por Kathy Acker, fotografiada por Tom DiCillo y cuenta con música de John Lurie.

Ambas retrospectivas estaban previstas inicialmente para 2020 y tuvieron que ser canceladas en el último momento debido a la pandemia. Ante la imposibilidad de contar con la presencia en el festival de sus realizadores, la organización de Play-Doc decidió posponerlas para esta edición, que por segunda vez consecutiva se celebrará del 22 al 26 de septiembre y no en la primavera como venía siendo habitual. Play-Doc regresa a la normalidad y retoma su carácter internacional, tras un año marcado por los cambios y las restricciones.